Descripción
En octubre de 1976 el disco, llamado Mateo y Trasante, estaba grabado y publicado. La recepción del álbum fue dispar. Jaime Roos, por ejemplo, dijo que la primera vez que lo escuchó le hizo reír, la segunda le provocó un shock y a la tercera audición sintió estar frente a una música superior. Tres décadas más tarde ese trabajo está considerado una obra capital de la música popular uruguaya.
